Esta sopa
es típica en algunas regiones de España, las abuelas la solían preparar cuando
iba comenzando el invierno y con él los resfriados y el frío.
El tomillo
tiene varias propiedades medicinales entre las que encontramos depurativas y
desinfectantes, por lo tanto esta sopa es bastante apropiada para ser tomada en
casos de gripa o resfriado.
La preparación
es bastante sencilla y tiene un agradable sabor, por lo cual también puede que
nos apetezca tomarla en diferentes situaciones o momentos.
Esta receta
es muy antigua pero se dice que incluso actualmente sigue siendo recomendada
por homeópatas y nutricionistas.
Es así
como esta planta que tiene su origen en el mediterráneo y pertenece a la
familia llamada Labiales a las cual también perteneces la albahaca y el romero
se utiliza como hierba medicinal y como una planta aromática.
Debido al
sabor y el aroma del tomillo es bastante utilizado en la cocina como condimento
para diferentes tipos de platos.
Cuando la
planta la queremos para fines de carácter medicinal se puede utilizar tanto las
flores como las hojas, las cuales se puedes hacer en infusión.
Ingredientes para preparar la sopa de tomillo
- Para: 4 personas
- Ramas de tomillo fresco: entre 4 y 5
- Aceite de oliva: ½ de taza
- Huevos: 4
- Pan duro: 300 gr
- Agua: 2 litros
- Pimienta al gusto
- Sal al gusto
Preparación de la sopa de tomillo
- Toma las ramas de tomillo y lávalas bien con agua, mira que partes no están frescas y retíralas. Reserva.
- En una olla echa el agua y lleva al fuego y caliéntala.
- Añade la sal, la pimienta y el tomillo, deja que hierva entre cuatro y cinco minutos.
- Toma el pan y pártelo en rebanadas finas.
- Toma los cuatro platos de sopas donde vas a servir la sopa y pon en cada uno una rebanada de pan, un huevo crudo y un chorrito de aceite de oliva.
- Mientras la sopa está hirviendo sírvela en cada plato y tápalos de forma inmediata.
- Deja en reposo cuatro minutos para que el huevo se pueda escaldar.
- Sirve de inmediato
- Disfruta.
Más sobre el tomillo
El aceite
esencial de esta hierba aromática contiene fenoles entre los que encontramos
terpenoides, flavonoides, carvacol y timol. Esto hace que el tomillo tenga
propiedades diuréticas, antitusivas, demulcentes, analgésicas, antifúngicas, carminativas,
antioxidantes, digestivas, antisépticas, antiinflamatorias, expectorantes,
antivíricas, hipotensivas, antibacterianas, entre otras.
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